Un problema real
Los estudios así lo demuestran. El 99% de las personas físicas y pequeñas empresas tienen problemas para acceder a la industria de los servicios profesionales.
Algunas no pueden asumir los gastos. Otras ni siquiera conocen sus derechos o no saben que tienen una necesidad legal. Y quienes finalmente llegan a contratar estos servicios, definen su experiencia como estresante y poco transparente.
Esto da lugar a que, para determinadas compañías, sea rentable incumplir cierta normativa o proveer un servicio de peor calidad. Mientras que la competencia que sí cumple en mayor grado con la normativa aplicable se ve penalizada injustamente.
Nos hemos propuesto resolver esta problemática y cambiar las reglas del juego. Somos innovación, somos inclusividad, somos in99.
Nuestra solución
Sabemos que la única manera de poder facilitar el acceso a estos servicios, y mantener nuestros estándares de calidad, es llevando la tecnología más allá de la simple digitalización. Esto nos permite facilitar, agilizar y economizar todos los procesos que hasta ahora se hacían presencialmente.
Con nuestro modelo 100% digital estamos redefiniendo el sector. Y creando un mundo más equitativo. Compartimos nuestro conocimiento y lo ponemos al alcance de todos.
Nuestra misión
Abrazamos e impulsamos el cambio
En in99 nos hemos unido para hacer las cosas diferentes. Buscamos continuamente maneras de simplificar y mejorar. Lo cuestionamos todo. Antes de dar una idea por buena la testeamos. Y si no funciona, pensamos más. Nos sentimos cómodos trabajando en un entorno donde el cambio es la única constante.
Audaces, creativos y con la mente abierta
Pensamos en grande. Si creemos en una idea, vamos a por ella. Sin miedo a equivocarnos. Porque, para nosotros, los errores son solo aprendizajes. Y con cada uno tenemos una nueva oportunidad para seguir mejorando. Juntos. Todos lideramos este cambio.
Nos relacionamos con honestidad
Aquí somos honestos los unos con los otros. Si algo no funciona, lo admitimos. Si necesitamos ayuda, la pedimos. Si nos piden nuestra franca opinión, la damos. Nos comunicamos con total transparencia y naturalidad. Sin endulzar nuestras palabras ni escondernos detrás de ellas. Y, ante todo, cumplimos nuestras promesas.
Razonamos y tomamos decisiones
Tener una estructura menos jerárquica y más flexible exige capacidad de decisión. Esto significa pensar bien antes de actuar. Cualquiera de nosotros nos sentimos cómodos tomando las riendas de un proyecto o de una situación. Y si las cosas se complican, ni nos abrumamos ni nos frustramos. Entendemos que puede ser parte del proceso.
Humildes
Independientemente del cargo que tengamos, todos conocemos nuestros límites y nos respetamos por ello. Sabemos qué se nos da bien y en qué podemos mejorar. Por eso, siempre estamos abiertos a escuchar las opiniones de nuestros compañeros. Y cuando triunfamos en algo, lo celebramos modestamente. Nos tratamos todos por igual.
Protegemos nuestra Cultura de Libertad y Responsabilidad. Y valoramos la autonomía a la hora de desempeñar el trabajo. Por ello, contamos con la certificación de Great Place to Work. Un reconocimiento a la excelencia en el lugar de trabajo, la gestión corporativa y al grado de confianza cultural. Y que se basa, entre otras cosas, en las opiniones de los empleados.
Sabemos que solo estando alineados con nuestros valores conseguiremos seguir creciendo por mucho tiempo.
Te contamos todo lo que sabemos.
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Es normal que no sepas todo lo que puedes reclamar. Ni el nivel de protección actual de tus intereses. Con unas sencillas preguntas lo descubrirás en menos de 99 segundos.
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